Es una enfermedad de los pulmones en la que se dañan loa alvéolos o sacos alveolares, destruyéndose lentamente la capacidad respiratoria. Esto produce una disminución de la cantidad de oxígeno que llega a la sangre. Los alveolos pierden la capacidad de vaciarse totalmente de aire y, por lo tanto, no pueden volver a llenarse para garantizar el ingreso adecuado de oxígeno al cuerpo.
La causa más común es el consumo de cigarrillos, porque el humo del tabaco y otros contaminantes liberan químicos desde los pulmones que dañan las paredes de los alveolos. El daño se agrava con el tiempo y afecta el intercambio de oxígeno y dióxido de carbono que se produce en los pulmones.
Los exámenes que le pueden encargar para su diagnóstico:
- Pruebas de función pulmonar, como la espirometría, que mide el volumen y el flujo de aire dentro de los pulmones.
- Radiografía de tórax.
- Gasometría arterial, para determinar las concentraciones de oxígeno en la sangre y los niveles de dióxido de carbono.
Los posibles tratamientos:
El enfisema no es reversible, pero se puede detener el deterioro pulmonar:
- Eliminando el consumo de tabaco
- Usando medicamentos para mejorar la respiración, como los broncodilatadores (inhalador manual o nebulizador) y los corticosteroides.
- Si el enfisema va asociado a infecciones respiratorias, le pueden recetar antibióticos.
- Se recomiendan también las vacunas para la influenza (gripe) y la vacuna para la neumonía.
- Cuando la situación es más grave puede recurrirse a la cirugía para realizar una reducción de pulmón, eliminando las zonas dañadas para mejorar la calidad de vida.
El hábito de fumar puede ser la causa de diversas enfermedades que afectan al pulmón y corazón:
- Cáncer de pulmón.
- Bronquitis crónica.
Ataques cardíacos; cuando usted fuma, la nicotina produce una disminución del oxígeno que llega al corazón, un aumento de la presión arterial sanguínea y daño a las arterias coronarias y otros vasos sanguíneos. Todo esto aumenta el riesgo de ataques cardíacos. Quienes fuman un promedio de 20 cigarrillos al día tienen el doble de riesgo comparados con aquellos que no fuman. Y este riesgo aumenta en las mujeres que, además de fumar toman anticonceptivos. |