Es una enfermedad provocada por una bacteria que infecta al sistema respiratorio superior. Es altamente contagiosa. Se caracteriza por una tos violenta e incontrolable que puede dificultar la respiración. A menudo se escucha un "estertor" profundo cuando el paciente trata de tomar aire. Por lo general el episodio de incubación es de 7 a 10 días, pero puede ser de hasta 21 días.
La tos ferina o convulsiva es causada por una bacteria muy resistente que se transmite cuando una persona infectada estornuda o tose. El contagio es mayor durante las primeras etapas de la enfermedad, hasta aproximadamente 2 semanas después de que comienza la tos. Los antibióticos reducen el período de contagio a 5 días, contados desde el inicio del tratamiento.
Los síntomas iniciales son muy parecidos a los del resfrío común, con romadizo y fiebre baja. Aparecen aproximadamente una semana después de la exposición a la bacteria. Los episodios graves de tos comienzan alrededor de 10 a 12 días más tarde.
Ataques de tos fuerte y reiterada que pueden dificultar la respiración, ocasionar vómitos, producir estertor de tono alto al tomar aire, causar pérdida temporal de la conciencia.
- Diarrea.
- Episodios de asfixia en guaguas.
El diagnóstico se realiza a través de una muestra de moco proveniente de secreciones nasales, generalmente el tratamiento se inicia antes de que los resultados estén listos.
Los antibióticos pueden hacer desaparecer los síntomas más rápido si se empiezan tempranamente, los menores de 18 meses deben mantener constante supervisión, ya que durante los ataques de tos puede detenerse temporalmente la respiración. Se debe mantener el aire libre de aerosoles y tabaco o humo de estufas a leñas, debe aumentar la ingesta de líquidos para evitar una posible deshidratación. Se debe tener cuidado con cualquier signo de deshidratación como por ejemplo boca y lenguas secas, piel secas, llanto sin lágrimas.
Si su hijo presenta coloración azulosa de la piel que indica la carencia de oxígeno, período de suspensión de la respiración (apnea), ataques o convulsiones, fiebre muy alta o vómito persistente asista al servicio de urgencia.
Los bebes tiene mayor riesgo de complicaciones como la neumonía, convulsiones, infección del oído, detención de la respiración.
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